Tienen parientes y amigos que aún viven en Cataluña. Estos ceutíes han vivido muy de cerca todo el desarrollo de la jornada del 1 de octubre. Este lunes han compartido su valoración de toda la situación. Las palabras más repetida han sido “tristeza” y “preocupación”.
Ni vencedores ni vencidos, achancan parte de la culpa a la falta de diálogo y pedagogía en la sociedad española, dentro y fuera de Cataluña.
Una día, el 1 de Octubre que marca un antes y un después y debería ser, a su juicio un punto de inflexión sobre cómo se está tratando la situación por parte de los gobiernos, nacional y regional.
Finalmente y a la espera de los acontecimientos, han opinado sobre una hipotética declaración unilateral de independencia por parte de la Generalitat.
Un momento de crisis, trascendental para la democracia en España, que mantiene a muchos ciudadanos, pendientes y preocupados del desarrollo de los eventos.