No es mala elección, para unas jornadas de Arquitectura en Ceuta, hablar en primer término de la que fue la primera edificación habitada de la historia de nuestra ciudad: la cabililla de Benzú. El mogote encierra en sus entrañas la caja negra de la población no sólo de Ceuta, sino de toda Europa; los tratados de prehistoria están incompletos o han de ser reescritos desde que hace veinte años comenzarn an los trabajos en la Cueva y Abrigo.
De aquellos primigenios neardenthales, al Plan General de Ordenación Urbana. De aquellos primeros en cruzar el Estrecho a las soluciones de la arquitectura para un mundo post-pandemia y en pleno cambio climático. El decano del Colegio de Arquitectos, José Moya, señala su satisfacción por estas jornadas, que coinciden con el Día Mundial de la Arquitectura. Para este año "queríamos hacer un diagnóstico del tejido urbano de la ciudad, y avanzando en los hitos a través de los siglos que han derivado en la ciudad que hoy tenemos".
En cuanto al Plan General de Ordenación Urbana, "viene de una revisión de casi veinte años, con lo cual en todos estos años se han producido muchos cambios. Es un plan que nace obsoleto, porque no ha recogido estas nuevas circuunstancias, pero este PGOU es mejor del que venimos, que es de año 1992, con lo cual lo importante es ponernos a trabajar en la modificación del nuevo Plan".
Un Plan que "en estos momentos se encuentra pendiente de la aprobación del texto refundido" de toda la reglamentación tanto nacional como autonómica que incluye, por lo que hasta que ese texto no quede aprobado no entrará en vigor.
Las jornadas sobre arquitectura también contarán con la visión de expertos locales, como el director del Instituto de Estudios Ceutíes, José Antonio Alarcón, que disertará sobre el 'barraquismo' como solución de emergencia a los problemas urbanísticos, o del que fuera arquitecto municipal, Javier Arnáiz Seco, que lo hará sobre el urbanismo moderno y el denominado 'plan Muguruza'.
