El Ministerio de Sanidad ordenó el pasado miércoles mediante un correo a varias Comunidades Autónomas, la retirada inmediata de un lote de mascarillas FFP2 del fabricante “Garry Galaxy” modelo N95, porque no reunían las condiciones de protección necesarias para los sanitarios ni cumplían con la normativa europea.
La retirada era una de las opciones, sin embargo se ha planteado otra alternativa, que es la que se ha empleado en Ceuta.
Hasta la ciudad ha llegado entre el viernes y el sábado un lote de 2.000 de estas mascarillas que no cumplían la normativa europea, y por tanto no podían ser empleadas como mascarillas FFP2 de protección personal. Sin embargo el total aún se desconoce ya que habían llegado otras anteriormente y actualmente se están contabilizando.
Estas mascarillas ya han comenzado a ser utilizadas por el personal sanitario al que fue entregada, antes de que INGESA conociera que eran defectuosas. Desde el viernes se están retirando de uso como equipos de protección personal de categoría FFP2 para emplearlas solo como mascarillas quirúrgicas, algo para lo que si pueden ser, asegura INGESA, empleadas, y tras consensuarse con los responsables, se ha tomado la decisión de aprovechar este material de esa manera.
