El terror se apoderó de la ciudad de Moscú este viernes noche, cuando un grupo de hombres armados perpetró un brutal ataque en la sala de conciertos Crocus. La escena de horror se desató cuando los asaltantes irrumpieron en el lugar y comenzaron a disparar indiscriminadamente contra las personas que se encontraban disfrutando del espectáculo.
El saldo preliminar reporta más de 40 muertos y al menos un centenar de heridos, en una tragedia que ha conmocionado a toda la sociedad rusa. Sin embargo, la tragedia no se limita a las víctimas de los disparos, ya que los terroristas lanzaron cocteles molotov durante su asalto, desencadenando un incendio de proporciones catastróficas.
La rápida difusión de los hechos a través de los medios de comunicación internacionales y las redes sociales ha generado un clima de consternación global. Videos impactantes circulan en línea, mostrando la crudeza del ataque y el caos que se apoderó del recinto durante el asalto.
#ULTIMAHORA en #Russia #Moscow El grupo terroristas islámico #ISIS se atribuye la responsabilidad del ataque terroristas en #Moscu, #Russia
— 🌎🇵🇦anthony orozco🇵🇦🌏 (@anthonyorozco1) March 23, 2024
El terrorismo debe ser erradicado, no importa cómo se llama, #Hamas o #ISIS todos deben ser eliminado
Hoy los aliados terroristas de #Putin pic.twitter.com/mLGFLcXn9y
La incertidumbre sobre la autoría del atentado ha aumentado la confusión y el temor. Mientras Kiev se desvincula del suceso, negando cualquier implicación de Ucrania, circula un supuesto mensaje del Estado Islámico que reivindica la acción. Sin embargo, muchas voces señalan la posibilidad de que este mensaje sea falso, por lo que aún no se puede determinar la verdadera autoría del ataque.
Esta masacre no solo representa una tragedia humanitaria de enormes proporciones, sino que también eleva la tensión en una región ya convulsionada por la invasión rusa de Ucrania.