La periodista muciana Nadia Ziani ha ofrecido, esta tarde, una conferencia en la Antigua Estación del Ferrocarril. El motivo: el odio. Algo que todos tenemos claro que es nocivo, negativo, destructivo. Pero ¿cómo lo definiríamos?. ¿Cómo saber cuando estamos ante una discusión, simple y normal, o ante un caso de odio? "Es algo complicado de definir. Al final es algo que define de manera personal cada cada uno y cómo lo percibe. Yo creo que habrá definiciones teóricas, muchísimas, pero al final cambia la percepción de cada persona, así que yo no podría dar una definición exacta. Para eso están los diccionarios y demás", admite,.
Entonces ¿por qué se habla tanto de odio en los últimos años?. Primer matiz: no estamos ante un fenómeno nuevo: " No es actual la islamofobia, racismo, la LGTBIfobia, la gitanofobia es algo que está hablando de ello, lo cual es muy importante porque antes de antes de luchar contra ello hay que. Hay que conocer y reconocer para luego poder luchar contra ello. Es cierto, que es algo que llevamos sufriendo entre comillas o sin comillas muchísimo tiempo, No es algo de los últimos tiempos, pero en los últimos años, con el auge de la extrema derecha hay que tenerlo más en cuenta".
Mencionada la extrema derecha. ¿Sólo odian las personas de esa ideología?. ¿El odio es patrimonio exclusivo de los simpatizantes y dirigentes de la extrema derecha?, preguntamos. "No es soóo una cosa de la extrema derecha, vale, es es algo que tenemos que poner en en el foco, pero todo el mundo, el vecino, mi compañero de trabajo. Porque el odio cotidiano es una de las cosas que menos la gente se da cuenta pero que existe allí, no? Que por ejemplo, se habla de los micromachismos, los microrracismos, no actuaciones del día a día que están ahí y que hay que poner el foco en ellas también. Y yo creo que todo el mundo debería, debería intentar entender esos discursos, porque está está tan arraigado que ni siquiera nos damos cuenta. Pero no, no es sólo una cuestión de extrema derecha, sino que es algo en lo que toda la sociedad debería poner atención".
Y claro: las redes sociales. La inmediatez que nos hace elegir el primer impacto, la ausencia de las filosofías en las escuelas, del pensamiento crítico: "las redes sociales tienen un montón de ventajas positivas, pero también tiene esto como ventaja negativa. Ojalá las redes sociales solo fueran los videos de gatitos graciosos, pero no, ojalá solo fuera pero pero no es el caso, no? Entonces el discurso de odio está muy presente en las redes sociales y además está muy presente entre la gente joven, lo cual es muy preocupante. Y lo que intentamos aquí con el proyecto ECO es un poco paliar ese discurso del odio, no presentar la otra cara de la moneda. Otras personas hablando de su situación, de sus vivencias, de su día a día", concluye.
