En los primeros compases de su Gobierno, José María Aznar organizó un encuentro en el Senado con todos los presidentes de las comunidades autónomas. De aquella, andaban por el Senado el extremeño Rodríguez Ibarra (PSOE), su compañero José Bono, nacionalistas como Jordi Pujol (CiU) y José Antonio Ardanza (PNV) o líderes del PP como el gallego Manuel Fraga y el madrileño Alberto Ruiz-Gallardón. Sin embargo, en aquella idea que luego fructificó en la actual conferencia de presidentes autonómicos -la principal diferencia estriba en que si bien aquello era una vez al año, siempre en el Senado y para asuntos generales, la conferencia la convoca el presidente del Gobierno sin calendario y para abordar cualquier asunto- llamó la atención la foto de tres hombres. Tres presidentes de autonomías nacidos en la misma ciudad: Ceuta. Eran el presidente local, Jesús Fortes (PP), pero también quienes ostentaban la condición de máxima autoridad en Andalucía, como Manuel Chaves y el presidente de Melilla, Ignacio Velázquez.
Y es que, a fin de cuentas, uno participa en política donde quiere, donde puede o donde le llaman, con independencia del lugar donde se nace. Así, si Ceuta ha tenido alcaldes como el gallego Francisco Fráiz, el jiennense Basilio Fernández o el catalán Antonio Sampietro, ¿por qué no pueden ser otros ceutíes alcaldes o concejales allende el estrecho?
A ser alcaldes de sus localidades de residencia aspiran dos de ellos. El más conocido -contamos su historia el pasado mes de marzo- es Dris Mohamed. Enarbolando el ideario de Blas Infante aspira a ser alcalde de Algeciras, bajo las siglas del Partido Andalusí-PRUNE. Mohamed puede, según algunos conocedores de la realidad algecireña, obtener alguna representación en la Plaza Alta, si es que consigue aglutinar en torno a su figura a los votantes de los barrios más desfavorecidos, en una ciudad en la que los musulmanes ya alcanzan los 6.000 efectivos. Precisamente, la ciudad de la Bella Bahía es pródiga en cuanto a otorgar bastones de mando a los ceutíes: el comunista Ernesto Lobato y el socialista Tomás Herrera nacieron a este lado del Estrecho.
Otra que puede acabar como máxima autoridad municipal es la socialista Liubba El Haddi. Es la cabeza de lista del PSOE en la localidad madrileña de Piñuecar-Ganduellas, en la que los 140 ciudadanos con derecho a voto podrán elegir entre ella, el candidato de VOX o el actual alcalde, Juan José Suárez (PP). Liubba ha trabajado en Suiza, es científica de formación, colabora en algunos medios digitales y es militante de la agrupación socialista de Chamberí, en la capital.
No serán alcaldes, pero están de modo testimonial donde se les ha pedido otros dos ceutíes. Abdelmalik Mohamed, quien fuera candidato al Congreso y primer coordinador de Ciudadanos en Ceuta ha decidido prestar "una ayuda a unos amigos a los que no les he podido decir que no". Son los integrantes de Valents (valientes en castellano), una formación que "recoge el testigo de lo que fue Ciudadanos en su día, aunque no somos una escisión. Aquella es una tierra dura, y son tiempos difíciles para el constitucionalismo", dice en referencia a Cataluña, "y me han pedido que eche una mano". Su labor será la de número siete en la candidatura del partido al Ayuntamiento de Gavá. "Fíjate el detallazo, que me han puesto inmediatamente por delante de Carlota Tutusaus". ¿Quien es Carlota?. La hija del alcaldable, Jaime.
Hay familias en las que la política parece ir en vena. Es el caso de los López Álvarez: Teresa es diputada por Ceuta y candidata número 3 por VOX a la Asamblea, en una lista en la que también figura su padre, Francisco. Pero es que no es la única: María del Mar, hermana de la parlamentaria ceutí, también es candidata. No en Ceuta, sino en la localidad zamorana de Toro. "Le hacía ilusión colaborar con los compañeros de Toro que son unos tipos geniales y a los que le hacia mucha ilusión tener a la hermana de la diputada nacional por Ceuta en sus listas, a la que admiran mucho por su fuerza y valentia .. y cómo decirle que no a tan buena tierra", explican desde el partido. Por cierto, que la congresista no es la única ceutí de nacimiento que representa a VOX en la Cámara Baja. Nació en la Ciudad Autónoma, pero es electo por Extremadura, uno de sus parlamentarios más conocidos, Víctor Sánchez Del Real
Para el final, la historia de dos amigos. A ambos les unió el Servicio Militar Obligatorio en Ceuta; eran principios de los años 80 cuando un chaval de Zamora y otro de Madrid se venían destinados a una ciudad en la que, sin imaginarlo, acabarían arraigándose para los restos. Fueron ínitimos amigos hasta que el segundo de ellos falleció, pero siempre militando en posiciones distintas, como las del PSOE y PP. El primero, el socialista, se llama Doroteo García Carbajal, que llegó a ser consejero de Gobernación en el fallido tripartito de 1999 y asesor de Delegación en los años de Rodríguez Zapatero; el que fuera su compadre Francisco Antonio González Pérez, triste y tempranamente fallecido en 2015, fue concejal, presidente del PP, diputado por Ceuta y delegado del Gobierno. Pero al margen de demostrar que tener un amigo en otro partido era perfectamente posible, ambos compartían algunos principios. "A finales de los noventa y principios de los 2000, en los años de plomo en que los concejales y alcaldes empezaron a ser víctimas potenciales de ETA, tanto PSOE como PP tenían problemas para completar sus listas, sobre todo en pequeños pueblos del País Vasco". Para rellenar listas, ambos se ofrecieron a sus compañeros en el País Vasco. En el caso de 'Teo', se fue a Forua: una villa alavesa contigua a Guernica donde fue de número 4 de sus compañeros del PSOE. "Aquello dejamos de hacerlo, básicamente porque ETA dejó de matar, pero sigo manteniendo contacto con los compañeros de la candidatura, suelo ir por ahí y son amigos", recuerda.
