El Grupo Parlamentario VOX acusa a los partidos del Gobierno -PSOE y Podemos- y a sus socios separatistas de emprender “una metamorfosis” de la actual ley de seguridad ciudadana “a medida de delincuentes e infractores para hacer de España una nación más insegura, con una legislación más débil y más precaria en su defensa, ya que sólo busca desarmar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, al Estado y desarticular la protección de los españoles”.
Así lo asegura la portavoz de VOX en la comisión de Interior, Teresa López, que participará mañana miércoles en la ponencia de la comisión de Interior sobre la proposición de ley orgánica de reforma de la ley orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana.
López afirma que, de llevarse a cabo la reforma con lo aprobado hasta ahora, “se despojará a los agentes de su autoridad, por cuanto se va a permitir la celebración de manifestaciones espontáneas sin comunicación previa”. Y es que el nuevo articulado de la ley señala que “la carencia del trámite previo de comunicación, aun pudiendo considerarse infracción leve, no será motivo para impedir el ejercicio de las libertades de reunión y manifestación”.
Esta modificación, denuncia el GP VOX, choca con la Constitución, ya que el artículo 21.2 ordena que “en los casos de reuniones en lugares de tránsito público y manifestaciones se dará comunicación previa a la autoridad, que sólo podrá prohibirlas cuando existan razones fundadas de alteración del orden público, con peligro para personas o bienes”.
Por otra parte, la portavoz de VOX en Interior ha lamentado que los cambios introducidos en la legislación reducirán las multas relacionadas con incidentes violentos en función de los ingresos del infractor, se suprimirán las sanciones por concentrarse alrededor de sedes gubernamentales como el Congreso, el Senado o parlamentos regionales y se rebajarán sanciones por el consumo o tenencia de droga, que pasa de ser una infracción grave a ser una leve.
Asimismo, añade Teresa López, “se va a absolver de la correspondiente sanción a los menores infractores o personas sin recursos, lo que provocará que se vean indemnes ante sus actos, reincidan y haya un mayor número de infractores entre menores y personas sin recursos”. Otra de las novedades es que “se podrá grabar a los agentes y dar difusión de esas imágenes posteriormente”.
Por si fuera poco, la nueva ley de seguridad ciudadana suprime como infracciones graves la perturbación de la seguridad ciudadana en oficios religiosos y se modifica el artículo 52 sobre el valor probatorio de las declaraciones de los agentes de la autoridad. Esto último, afirma López, provocará que “la presunción de veracidad de los agentes siempre va a quedar en entredicho por la modificación acordada y la versión de los agentes quedará al albur de una interpretación arbitraria”.
Menoscabar la autoridad de los policías, por tanto, es uno de los objetivos de la modificación legislativa. Esto también se aprecia en la nueva disposición adicional que regulará que las FCSE deben tener un “plan de mediación policial para la resolución de conflictos, debiendo contemplar la mediación como estándar de trabajo ante la ciudadanía”. Es decir, “que ante barricadas o manifestaciones violentas los agentes se ven sin el respaldo legal para actuar y disolverlas”, denuncia la portavoz de VOX en Interior.
En conclusión, Teresa López asegura que la reforma de la ley de seguridad ciudadana “va a desarmar legalmente a las FCSE, va a hacer de los agentes simples mediadores en caso de incidentes graves en nuestras calles y va a dejar a los españoles más inseguros ante infractores y autores de diversas amenazas para su seguridad”.
