La crisis del coronavirus tendrá, obviamente, una repercusión económica. Tal vez sea pronto para cuantificarla económicamente, pero ¿nos enfrentamos al peor de los escenarios posibles?
Estimaciones independientes asumen una caída del PIB del 8% en España, con un aumento del paro hasta el 35% que se estabilice en el 20%. y una recuperación lenta y alargada. España caería más que la media de la UE y con un paro superior.
En los últimos tiempos, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apuesta por una especie de "Plan Marshall" a la europea. ¿Cree que acierta con esa propuesta y que la época de la austeridad hay que darla por finiquitada, o por el contrario piensa que no tendría el efecto deseado?
En Europa no ha habido austeridad, solo moderación presupuestaria. No se puede hablar de austeridad cuando los estados consumen más de un 40% del PIB de un país y con déficits estructurales.
El Plan Marshall es simplemente una entelequia, porque ya vivimos la mayor expansión monetaria y fiscal de la historia. No hay Marshall para financiarlo, porque el resto de países del mundo también se encuentran con sus propios problemas por el mismo caso.
Lo que debemos hacer es lo que están haciendo los países líderes en contener la pandemia, como Crea del Sur, Singapur y Taiwan, que están haciendo lo contrario a lo que pide Sánchez que es un enorme gasto.
¿Qué le parecen estas medidas, sobre todo en relación al confinamiento por sectores, los ERTES o el permiso retribuido?
Es inaceptable que el gobierno esté improvisando y dejando de lado a autónomos y pymes. Lo único que ha hecho ha sido dar opción a endeudarse para pagar impuestos, y por esa inacción hemos perdido 122.000 empresas en solo unos días en marzo. Los ERTE son un parche, pero no la solución, ya que se pone en peligro el tejido productivo a medio plazo, y el permiso retribuido es simplemente, de nuevo, pasarle al balance de las empresas el coste del confinamiento.
A nadie escapa que el sistema sanitario no sólo va a sufrir sensibles bajas en cuanto a fallecimientos, cuadros de stress postraumático y similares. ¿Debemos prepararnos, también, para una inyección considerable de dinero en ese sector? ¿Sería recomendable, ahora, que el Gobierno central recuperase las competencias en Sanidad para controlar precisamente esas inversiones?
Si algo ha demostrado esta crisis es que centralizar las competencias ha sido un absoluto fracaso de gestión. El sector sanitario puede acceder a fondos más que suficientes con colaboración público-privada como ocurre en todos los países líderes. Si pensamos que un país con déficit estructural y problemas tan evidentes de gestión y competencia estatal va a solucionar sus problemas con más poder estatal, entraremos en una crisis mayor a medio plazo. Es curioso que en esta crisis los polñiticos hayan decidido ignorar el ejemplo de los países líderes, que gastan menos en Sanidad y tienen menos gasto público y muchos menos fallecidos. Es el caso de países como Singapur, Corea del Sur, Taiwan, y muchos europeos.
Una crisis de mala gestión gubernamental no se soluciona dando más fondos y poder al gobierno.
¿Cómo cree que puede repercutir esto en cuestiones tan esenciales como los créditos hipotecarios o las pensiones de jubilación?.
Los préstamos de dificil cobro se van a disparar y los bancos están actuando para atender a los clientes de manera eficiente, pero el crédito no podemos esperar que se dispare. En esta crisis estamos aprendiendo la importancia capital de la banca, que está gestionando de manera excelente.
Las pensiones no están en peligro. El gobierno debería aplicar una reducción de gasto duplicado e innecesario, que es mucho. Nose puede pedir economía de guerra a todos menos a la administración.
A nivel global ¿puede salir, aún, más favorecida Asia como motor económico del mundo, y en concreto China y Corea del Sur? ¿En qué lugar quedará Europa?
China puede sufrir a corto plazo pero está muy preparada. Japón ya ha pedido a sus empresas que abandonen China y eso es una mala política que dañará mucho a Japón, una economía que ya estaba en estancamiento. Corea del Sur, Taiwán o Singapur van a salir muy fortalecidos. La Unión Europea me temo que no tiene la capacidad de salir con la fuerza y el crecimiento de los países más abiertos y con mayor libertad económica, porque los escollos al empleo y la inversión ya eran muchos.
¿Ve peligrar el futuro de la Unión Europea como lo hemos conocido, tras nuevos capítulos de tensión entre el Norte y el Sur?
No. La tensión que hemos vivido ha sido forzada por algunos países que esperaban solidaridad sin responsabilidad. La Unión Europea tiene amplios mecanismos de solidaridad, pero con condicionalidad y responsabilidad, como debe ser. Eso es lo que va a llevar a que los lazos de unión permanezcan. La responsabilidad. La Unión Europea siempre ha salido reforzada de las crisis.
