sábado. 27.04.2024
INCENDIO EN GARCÍA ALDAVE

La falta de vegetación tras el incendio podría arrastrar tierra a los pantanos

El incendio de García Aldave puede arrastrar tierra al fondo de los embalses del Renegado y el Infierno en cuanto comiencen las lluvias. Las llamas arrasaron parte del cuerpo arbóreo que rodea a ambos embalses, aunque esto no tenga porque afectar a la calidad del agua. Las instalaciones de oficina han quedado seriamente afectadas.

El helicóptero actúa sobre una de las viviendas del pantano durante el incendio/ Archivo
El helicóptero actúa sobre una de las viviendas del pantano durante el incendio/ Archivo

Tanto el embalse del Renegado como el del Infierno fueron dos de los puntos sensibles durante el incendio que asoló 130 hectáreas de monte en García Aldave. Lo fueron, por un lado, porque las llamas rodearon ambos embalses y porque el agua almacenada fue fundamental para extinguir el incendio.

El agua almacenada en el Infierno: un sistema de cables subacuáticos instalados en el Renegado complicaban técnicamente las tareas del helicóptero que tomó agua para sofocar las llamas. Por tanto, solo pudo extraerse agua del Infierno, el más pequeño de los dos. No ha afectado gravemente a la cantidad de agua acumulada, "apenas unos mil metros cúbicos", apuntan fuentes de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

Sin embargo, ambas instalaciones han quedado dañadas. Las viviendas de los trabajadores del pantano han quedado sin luz ni agua, ante la magnitud de las llamas, y las instalaciones de oficina, seriamente dañadas. "Las llamas fueron de tal magnitud que, incluso, la pintura de la pared estalló". De hecho, buena parte de estas instalaciones están ahora mismo "casi sin poder utilizarse".

En cuanto al agua de los embalses, en próximas semanas comenzará el proceso de sedimentación. No sólo de las cenizas, sino de tierra. Buena parte de la masa arbórea que rodea a ambos lugares ha quedado devastada. Ello motivará que, con las primeras lluvias y al no haber vegetación que la frene, la tierra caiga al fondo de los pantanos y sedimente.

"Con un sistema de depuración estandar, no hay problemas para el consumo de agua", señala esta fuente. Llegan estos problemas en un momento en el que -recordemos- con motivo del programa de ahorro energético, la planta desaladora solo está funcionando de noche. En estos instantes, entre ambos pantanos tienen acumulados 1.001.000 hm2. Es decir: un 44'6% de su capacidad.

La falta de vegetación tras el incendio podría arrastrar tierra a los pantanos