jueves. 02.05.2024
VERANO

Los peligros para la salud en la época estival y cómo evitarlos

Con la llegada del verano y las altas temperaturas, es importante tener en cuenta los peligros para la salud que pueden surgir en esta época del año. Desde golpes de calor hasta problemas de piel y deshidratación, es fundamental conocer las recomendaciones para prevenir estos riesgos y disfrutar del verano de manera segura.

Pavana sobre la balaustrada de la playa del Chorrillo / Rafa Báez
Pavana sobre la balaustrada de la playa del Chorrillo / Rafa Báez

El verano, una temporada tan esperada por muchos, no está exenta de peligros para la salud. Las altas temperaturas, el sol abrasador y las actividades al aire libre pueden representar riesgos significativos si no se toman las precauciones adecuadas. Para garantizar unas vacaciones seguras y disfrutar del sol sin contratiempos, es esencial estar informado y seguir algunas recomendaciones básicas.

Uno de los peligros más comunes en verano es el golpe de calor. Esta afección puede ser grave e incluso poner en peligro la vida. Los síntomas incluyen mareos, confusión, piel enrojecida y caliente, pulso rápido y dolor de cabeza. Para evitarlo, se recomienda mantenerse hidratado bebiendo abundante agua, evitar la exposición al sol durante las horas de mayor intensidad (entre las 11.00 y las 16.00), utilizar ropa ligera y protector solar, y buscar lugares frescos y sombreados.

La deshidratación es otro riesgo importante en verano, especialmente cuando se realiza actividad física al aire libre. La sudoración excesiva puede llevar a una pérdida de líquidos y electrolitos en el cuerpo, lo que puede provocar mareos, fatiga, calambres musculares e incluso desmayos. Para prevenirla, es fundamental beber agua regularmente, incluso si no se siente sed, y evitar el consumo excesivo de alcohol y bebidas azucaradas.

Además, la exposición prolongada al sol sin la protección adecuada puede tener consecuencias perjudiciales para la piel. Las quemaduras solares aumentan el riesgo de desarrollar cáncer de piel y aceleran el envejecimiento prematuro. Para protegerse, se recomienda utilizar protector solar con un factor de protección adecuado para cada tipo de piel, aplicarlo de manera generosa y repetir la aplicación cada dos horas o después de nadar o sudar. También es importante usar ropa protectora, como sombreros de ala ancha y gafas de sol.

El verano también puede traer consigo problemas gastrointestinales, como intoxicaciones alimentarias. Las altas temperaturas facilitan el crecimiento de bacterias en los alimentos y aumentan el riesgo de contaminación. Para evitarlo, se aconseja mantener los alimentos refrigerados, evitar el consumo de productos perecederos en lugares sin refrigeración y asegurarse de que los alimentos estén correctamente cocidos antes de consumirlos.

Mar y Playa

La playa y el mar son pasatiempos populares durante el verano, pero también presentan ciertos peligros para la salud que deben tenerse en cuenta. Además de las recomendaciones mencionadas anteriormente, es importante tomar precauciones adicionales al disfrutar de estos entornos acuáticos.

Al ingresar al mar, es esencial ser consciente de las condiciones y tener en cuenta las indicaciones de los salvavidas. Las corrientes marinas pueden ser peligrosas y arrastrar a los nadadores mar adentro.

Además, es importante tener en cuenta los riesgos de la exposición prolongada al sol mientras se está en la playa. La combinación de arena reflectante y agua puede aumentar la exposición a los rayos ultravioleta. Es esencial aplicar protector solar incluso en áreas que no están directamente expuestas al sol, como los hombros y la parte posterior de las piernas. Además, buscar sombra o utilizar una sombrilla puede ayudar a reducir la exposición al sol y prevenir quemaduras solares.

En la playa, es posible encontrarse con objetos afilados o peligrosos enterrados en la arena, como conchas rotas o cristales. Antes de colocar las toallas o sentarse, es recomendable inspeccionar el área y asegurarse de que no haya objetos que puedan causar lesiones. También es importante utilizar calzado adecuado al caminar por la playa para evitar heridas en los pies.

Por último, es crucial recordar que nadar en el mar requiere cierto nivel de habilidad y precaución. Si no se tiene experiencia en natación o se está en un entorno desconocido, es mejor no aventurarse en aguas profundas. Siempre es recomendable nadar en áreas vigiladas por socorristas y seguir las instrucciones y recomendaciones de seguridad.

Los peligros para la salud en la época estival y cómo evitarlos