Así, con este eslogan, en grandes letras de color rojo chichón comenzaba un cartel que hasta donde mi memoria llega, creo que ha sido una de los mejores reclamos publicitarios que he visto. Ese cartel estaba situado en la entrada de la facultad, y nada más entrar tus ojos se iban hacia él. Al acercarte más, el resto del texto se conseguía leer y descubrías que había una gran oferta para patinar sobre hielo ese fin de semana.
Recuerdo como todos (y todas) se acercaron a ver el cartel, algunos por curiosidad, otros por … en fin, cada cual con su motivación, lo cierto es que muchos lo pasamos bien patinando sobre hielo ese fin de semana y a un buen precio.
La razón de empezar así mi artículo es, que hoy quería hablar sobre la importancia que tiene, para cualquier empresa, ser visible en internet. Esto es así, nos guste o no, seamos dueños de Amazon (ya nos gustaría a muchos) o de la tienda de la esquina.
Si eres un cibercomprador o cibercompradora, en alguna ocasión se te habrá planteado la duda de si estará o no más barato lo que estás comprando en una determinada Web o en la tienda especializada que hay cerca de tu casa. Lo que nos ocurre en muchas ocasiones, es que estamos en una sociedad cronometrada y apenas tenemos tiempo, y por ello, aunque esa tienda esté cerca, no te molestas en ir a visitarla o no encuentras el momento y al final compras a través de Internet. En alguna ocasión incluso, me he puesto a buscar la Web de esa pequeña tienda y a lo máximo que he llegado es a encontrar un perfil de alguna red social, en la que apenas cuelgan nada o si lo hacen se pierde en el océano de post y más post que existen.
No recuerdo quien fue el que dijo que “lo que no está en la red no existe” refiriéndose a las empresas, y esto le pese a quién le pese, cada vez es más cierto. En esta sociedad acelerada, en la que apenas nos paramos a mirar un escaparate, cada vez más personas van a comprar “a tiro hecho”, es decir, primero miro lo que quiero y luego voy a por ese artículo, y si puedo pedirlo a través de la web mejor. ¿Cuantas personas conoces que hacen ya la compra por Internet? Cada vez son más. Prueba de ello es que no hay ninguna gran marca, venda lo que venda, que no permita ya comprar a través de su Web y lo traiga a mi casa o al menos me permita recogerlo en la tienda.
Con las pequeñas tiendas pasa lo mismo. Si usted es el propietario o propietaria de un pequeño comercio, no lo dude, o tiene web, o su comercio nunca crecerá, corriendo el riesgo en algunos casos de tener que cerrar. Tenemos todo lo que necesitamos a golpe de clic, y si usted empresario o empresaria quiere que seamos sus clientes tienen que ofrecernos el lugar donde hacer nuestro clic en la red.
Pongo un ejemplo en el que muchos y muchas os veréis reflejado, quizás con otro artículo y otro lugar. Llevo días buscando un casco de moto, sus majestades los Reyes Magos me ha pedido que lo gestione por ellos y no puedo defraudarlos. Lo primero que he hecho es mirar por Internet cual es el que me gusta, pero al encontrarlo no hice clic y lo pedí, solté el ratón y pensé que seguramente ese casco estaría en una de las tiendas de moto de la ciudad, así que decidí ir a buscarlo al día siguiente. Un par de días después, aún sin casco, se lo ví puesto a un motorista, con lo que mi pálpito empezar a tomar forma, ¡Seguro que lo ha comprado en una de esas tiendas, tengo que ir a preguntar!. Viendo que pasaban los días y no encontraba tiempo para bajar hasta el establecimiento, busqué por internet si tenía una Web donde mirar si tenían o no el caso, estoy muy liado siempre y la verdad no me apetecía ir hasta la tienda, no la encontré. Transcurrida una semana desistí en mi intento de potenciar el comercio local, abrí mi navegador e hice clic es ese lugar de compras por Internet, así que mi casco vendrá desde una tienda que está físicamente en Zaragoza pero que tiene una Web donde hacer el clic. Esto es solo un ejemplo pero es así en muchas ocasiones.
Algunos “emprendedores” han decidido dar el paso y poner sus productos en la red social más conocida, sin embargo, no son especialistas en gestión de comunicación y desconocen lo que les sucede a sus publicaciones cuando las colocan, ¡que desaparecen sin pena ni gloria en la mayoría de las ocasiones!.
Es cierto que las redes sociales son importantes, pero debido a su forma de funcionar no sirven como lugar de referencia de un comercio. Si quieres que la gente te visite tienes que tener una Web.
Una página Web es como un escaparate al mundo donde tu puedes colocar en sus estanterías, virtuales por supuesto, tus productos y siempre estarán en el mismo sitio, hasta que decidas moverlos tú. Una vez que tienes tu Web y tus productos puestos de una forma atractiva, ya puede empezar a hacer campaña, entonces sí, ahora si tiene sentido una red social. Para difundir algo concreto, una oferta, una campaña de fidelización, etc… pero no como escaparate.
¿Cuántas veces hemos intentado, sin éxito, buscar una publicación que habíamos leído o visto hace poco tiempo y comenzamos a navegar hacía abajo y aparecen publicaciones de hace muchísimo tiempo pero la que buscamos no? Muchas, seguro. Esto es porque las redes sociales, posicionan las publicaciones según el número de interacciones que tienen, es decir, cuando le damos a Like, escribimos un comentario, etiquetamos una foto, etc… Si no hay interacción, su algoritmo (el programa que decide que te interesa ver y que no) entiende que no tiene ningún interés para ti y te lo va “hundiendo en el océano de post que no gustan”.
Sin embargo, cualquiera que pueda encontrar tu Web, tendrá siempre la información de tus productos colocados en las mismas estanterías virtuales que tú decidieras. Nadie va a tu tienda y te cambia las cosas de sitio, en la Web tampoco. Así que, si quieres que tu empresa mejore, deberás de crear una página donde colocar tus productos de forma que siempre te puedan encontrar al buscarte en internet. Es importante que pidas ayuda a algún experto o experta ya que nuestra página es como nuestro local físico. Si alguien entra y no le gusta como está “decorado” o cree que está desordenado, no se sentirá comod@ navegando por ella y probablemente no volverá a visitarnos.
Y por último no lo dudes, cuando quieras comenzar tu campaña publicitaria pon en letras bien grandes en tu red social favorita “SEXO GRATIS” y a continuación explica que “tienes los mejores garbanzos de la ciudad”.