Juanjo Coronado
23 de febrero de 2021, 13:10
Probablemente, fue un poco de suerte lo que evitó una auténtica masacre. Fue el 18 de noviembre de 2019: un conductor kamikaze cruzaba la frontera del Tarajal a toda velocidad con una furgoneta. El vehículo tuvo un accidente metros después, en la subida al Hospital Universitario. En la furgoneta, viajaban ocultos 52 inmigrantes, todos subsaharianos. Afortunadamente, no hubo que lamentar más que contusiones.
Estos hechos ya tienen una sentencia: diez años y medio de prisión, justo la mitad de lo que se pedía en un primer momento, tras un acuerdo entre la defensa del conductor -que ha dado muestras de arrepentimiento- y fiscalía. Este acuerdo se ha alcanzado en las últimas horas, según han confirmado fuentes judiciales a Ceuta Televisión.
