jueves. 02.05.2024

El Parque de Santa Catalina ha vuelto a primera línea de la actualidad en las últimas horas ante el estado que presentan sus instalaciones, uno de los puntos de paso de la carrera cívico-militar Cuna de la Legión, a apenas un mes de la prueba. Un estado actual de las obras que el consejero de Fomento y Medio Ambiente y portavoz del Gobierno ha asegurado que no será un impedimento para que la carrera se desarrolle con normalidad, señalando que “está coordinado para que la primera semana del mes de marzo (la Cuna se celebra el día 2) los caminos estén balizados y perfectamente”.

También ha negado Alejandro Ramírez que la obra vaya con retraso, a pesar de que fue en mayo de 2022 cuando se anunció que se realizaría la misma, presupuestándola para esa anualidad y la siguiente, y no iniciándose hasta el pasado verano. En pleno 2024 TRAGSA solo ha ejecutado la primera fase de la obra y está iniciando ahora la segunda, que está previsto que finalice entre noviembre y diciembre de este año. “La empresa dice que los trabajos están avanzados”, ha señalado el consejero, “ya se han ejecutado trabajos por 500.000 euros”, ha continuado, subrayando que lo que queda ahora es el aporte de tierras y plantas para que tenga vegetación. 

Y es que ese era el verdadero objetivo de esta actuación, convertir al Parque de Santa Catalina en un vergel, ese que se prometió que allá por 2010 y que nunca ha llegado a ser una realidad. Antes de iniciar esta actuación, la Ciudad encargó un informe a TRAGSA para saber los motivos por los que ese vergel nunca existió, unos motivos que iban más allá del fuerte viento que combate en la zona y que tenían que ver con que la capa de manto colocada sobre la superficie plástica que se empleó para aislar el antiguo vertedero, que no contaba con la suficiente calidad. Además, la adjudicataria de la restauración del Parque tras detectar los primeros problemas, la empresa Intervías, no depositó tierra suficiente, desapareciendo parte de la misma por el propio correr de las aguas pluviales y viéndose en algunas zonas la capa plástica de aislamiento.

Y eso que, antes de esta actuación, la inversión realizada en el Parque de Santa Catalina se acercaba ya a los 10 millones de euros, los ocho iniciales más los 1'2 de la restauración vegetal (tal y como señalaba el diario ceutaldia ya en 2017), sin lograr el objetivo inicialmente previsto, que el antiguo vertedero se convirtiera en un verdadero espacio de naturaleza urbana. Ahora, tras el encargo a TRAGSA de la nueva restauración del Parque, por valor de 4'5 millones de euros, la cantidad invertida superará los 14 millones. ¿Se logrará esta vez convertir el Parque en el vergel que se prometió tras la clausura del vertedero?

Catorce de años de inversiones y un objetivo fallido: convertir Santa Catalina en un...