lunes. 06.05.2024

La raíz de todo bien crece en la tierra de la gratitud

Monumento de la Policía Local/ Juanjo Coronado
Monumento de la Policía Local/ Juanjo Coronado

A pesar de querer permanecer en el anonimato, es de justicia agradecer a quienes, con su enorme empatía, nos han ayudado tanto física como emocionalmente a sobrellevar la grave enfermedad que padece desde hace cinco años nuestra hija pequeña. Somos una familia caballa procedente de un barrio humilde y como dicen un gran amigo, es importante “no olvidarse de donde uno “viene” para poder continuar en el tren de la vida”. Como consecuencia de nuestro amor, nacieron nuestros dos hijos, Omar y Samar, ambos alumbraron nuestras vidas hasta límites insospechados.

Con tan solo dos añitos y medio, tuvimos conocimiento de que nuestra pequeña Samar se tenía que enfrentar a una grave enfermedad, contra la que actualmente seguimos luchando, recibiendo la noticia a través de su pediatra, la Doctora Laura, la cual nos ha demostrado a lo largo del tiempo ser una gran profesional y mejor persona.

A partir de ahí, hemos de reconocer que estamos pasando un auténtico calvario, ya que combatir la enfermedad supondrían tratamientos agresivos de quimioterapia, operaciones especialmente delicadas, alguna de ellas, incluso lejos de proliferar positivamente, le derivaron en otras patologías importantes, todo ello teniendo que compartir nuestra residencia en nuestra Ciudad, con la estancia en el Hospital Materno de Málaga, donde siempre nos tratan con exquisita sensibilidad, cariño y profesionalidad. 

Actualmente, se encuentra en un proceso de inmunoterapia contra el Cáncer y cuando las circunstancias se lo permiten, asiste al CC San Daniel, su colegio, donde no sólo la están apoyando incondicionalmente, sino que nos sentimos especialmente en deuda con sus profesionales, tanto con su Equipo Directivo, como con los docentes que se han relacionado con nuestra pequeña y con su hermano, haciendo en este apartado una excepción, porque en estas líneas NO queríamos personalizar, pero la ayuda de Silvia, Mónica, Alicia, Juan Antonio, Teresa y Carlos está siendo de “matrícula de honor”.

Intentar agradecer toda la ayuda que nos habéis brindado es una ardua tarea, debido a que sois tantos/as que la lista se hace interminable y en la cúspide de nuestro apoyo, se encuentra nuestra GRAN FAMILIA AL COMPLETO, los cuales tienen un peso de muchos quilates en nuestro difícil camino y sin ellos, hubiera sido imposible “caminar”. También queremos mandar un abrazo gigante a Omar, nuestro pequeño, que con tan sólo nueve años y tras superar problemas emocionales por la enfermedad de su hermana, sigue fuerte y firme en la que es nuestra lucha.

En el ámbito laboral, sólo tengo palabras de agradecimientos por la empatía y ayuda recibida por mi entorno, tanto mis superiores jerárquicos como el resto de compañeros/as, me han facilitado el camino para desempeñar mi puesto de trabajo, consiguiendo equilibrar éste, con el cuidado que debía dispensar a mi pequeña, con lo cual, una vez más toca rendirnos ante la grandeza que tiene el Cuerpo de la Policía Local de Ceuta, haciendo extensivo este agradecimiento a la Asociación de Policías Locales San Urbano y al Sindicato UGT, ambos organismos, siempre pendientes del trascurso de la enfermedad y de hacerme más fácil la vida.

Cada viaje, cada travesía, se hace más amena con la delicadeza y el cariño con el que tratan a Samar las azafatas de FRS, con lo cual, es justo reconocer su gran profesionalidad y agradecerles su atención. No os podemos ocultar que nuestra vida laboral y familiar, desde que recibimos la noticia, se ha convertido en un auténtico camino lleno de dificultades, pero no nos queremos olvidar de nadie, así que todos/as aquellos/as que os habéis preocupado por nuestra pequeña, estáis en nuestros corazones, tanto amigos, conocidos, vecinos y en general al pueblo Ceutí os estaremos ETERNAMENTE AGRADECIDOS, aprovechando estas líneas para seguir animando a todas las familias que se encuentran inmersos en una enfermedad que lo pone todo tan difícil, a ellos… 
“siempre fuertes”.

“A TODOS/AS GRACIAS POR INSPIRARNOS Y ENSEÑARNOS A SER VALIENTES”

FDO.: JALID Y SANAH

La raíz de todo bien crece en la tierra de la gratitud