2.497. Esa es la aterradora cifra que han ofrecido, a lo largo de la mañana, las autoridades marroquíes. Es la última actualización de víctimas mortales del terremoto que ha devastado el sur del vecino país. Además, el listado de heridos se sitúa en 2.476. Sobre esto último, y a diferencia de lo que venía ocurriendo desde los primeros momentos, se ha dejado de ofrecer información sobre cuantos están, o no, en situación de gravedad.
Mientras, sigue la solidaridad con el vecino país. La Ciudad Autónoma de Ceuta ha acordado destinar a través del Ministerio de Exteriores -en buena lógica, mediante la Agencia Estatal de Cooperación Internacional para el Desarrollo- 50.000 de euros para contribuir a paliar la catástrofe. En un comunicado, el Ejecutivo señala que "la Consejería de Presidencia y Gobernación y de manera coordinada con el departamento homólogo del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla, está ultimando los trámites para aportar 50.000 euros (100.000 entre las dos ciudades) para ayudar a los afectados por el devastador terremoto producido en Marruecos. Ayuda que será canalizada a través del Ministerio de Exteriores". Se trata de una donación similar a la destinada, por ejemplo, para el terremoto que a principios de este año tuvo lugar en Turquía y Siria.
Esta cantidad tendrá que aprobarse por parte del Ejecutivo en Consejo de Gobierno, y saldrá del Fondo de Contingencia, dotado con 500.000 euros en el Presupuesto General de la Ciudad para este año. Es decir: el 20% de la dotación de esa partida se ha destinado a sufragar los daños ocasionados por los seismos tanto en el vecino país como en el otro extremo del Mediterráneo.
Sobre el terreno seguimos sin tener noticias de españoles entre los muertos y heridos. Si se ha producido ya una primera evacuación de ciudadanos a España, de unos treinta y seis, y no se descarta que se produzcan más en las próximas horas. Otras administraciones han ofrecido su ayuda a Marruecos: caso del Ayuntamiento de Madrid o la Generalitat de Cataluña. El consistorio ofrece a sus bomberos, mientras que el Ejecutivo catalán pone a disposición del país vecino forenses para el reconocimiento de cadáveres.
Ha habido, eso si, cierta controversia en torno a la ayuda internacional. Hay que aclarar que el protocolo para desplegarla en un país que ha sufrido una catástrofe como la vivida por Marruecos pasa porque sea el propio Gobierno del país receptor el que la solicite. En el caso de Marruecos, ha pedido ayuda expresamente a España, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Reino Unido, "países amigos" según el gobierno magrebí. La polémica radica en la ausencia de Francia, pese a que el presidente Emmanuel Macron puso a disposición de Rabat ayuda "en el segundo que quisiese". En Francia tratan de aminorar la controversia, insistiendo en el orden de actuación explicado al inicio de este párrafo y recalcando que Marruecos cuenta con su apoyo. Si lo requiere, claro...
