Vox compartía en sus redes sociales en las últimas horas la convocatoria de concentraciones frente a las sedes del PSOE en todo el país. Una convocatoria, aclaraban en conversación con este medio, que no era suya pero que apoyaban. Así, tras la concentración convocada por el PP, un par de centenares de personas se han concentrado frente a la sede socialista, especialmente en la plaza del Teniente Ruiz, para mostrar su indignación tras los acuerdos de Sánchez con los independentistas catalanes para la investidura.
La manifestación, con una importantísima presencia policial, ha estado marcada por las exigencias de dimisión de Pedro Sánchez, en primer lugar, y a continuación por los insultos. Proclamas como “Pedro, cabrón, tu sitio está en prisión” o “socialista el que no vote y la que no vote puta” se han podido escuchar frente a una sede socialista vacía y ante la que también ha habido palabras para el líder socialista local, al que se han referido como “lanchero” y “vendepatrias” en varias ocasiones.
La cita estaba prevista para la una de la tarde pero en los minutos previos, y antes de que el líder de Vox llegara a las puertas de la sede socialista, los concentrados han decidido trasladarse a las puertas de la Delegación del Gobierno. Así, a su llegada Juan Sergio Redondo ha permanecido unos minutos en la zona para, posteriormente, animar a los pocos que quedaban en la plaza del Teniente Ruiz, a trasladarse a la plaza de los Reyes.
Ha sido allí donde el líder de Vox ha señalado lo que su partido lleva repitiendo a lo largo de los últimos días, “este golpe no lo vamos a permitir”, ha afirmado, “no vamos a permitir que los traidores se adueñen del futuro de los españoles”. Redondo ha asegurado que seguirán en las calles, dando una “batalla pacífica”. Para el portavoz de Vox “debemos prescindir de esta gente que esta vendiendo esta nación”.
Durante la concentración en la plaza de los Reyes también se han escuchado proclamas contra Sánchez y el PSOE como “Pedro, golpista, tú eres el fascista”. Una concentración que ha acabado disolviéndose poco antes de las dos de la tarde.
