A esta hora de la mañana, el termómetro marca treinta grados. Esta información se está redactando pocos minutos antes de que alcancemos las 09.00 horas. Es decir: estamos iniciando uno de los días más calurosos de lo que llevamos de un verano sofocante y asfixiante. Y hoy, además, estamos oficialmente en alerta.
Las previsiones sitúan a la Ciudad Autónoma en un escenario que parecía imposible hace unos años: cerca de los 40 grados de temperatura. La mínima va a ser de 22 grados y la máxima será de 36. Pero es que la humedad se va a ir al cien por cien en algún momento del día, prevé la Agencia Estatal de Meteorología.
No sólo eso, y ahora viene algo con lo que hay que tener especial precaución: el índice ultravioleta.Va a superar, con creces, los diez puntos, por lo que hay que extremar las precauciones en el caso de mujeres embarazadas, niños, personas mayores y enfermos crónicos. Hidratación: toda la que se pueda, principalmente zumos naturales y agua. Y evitar cualquier tipo de esfuerzo o exposición innecesaria al sol. También hacer comidas ligeras como ensaladas y mantener los medicamentos en un sitio fresco, puesto que el calor excesivo puede motivar alteraciones en su composición. Todo ello, además de buscar lugares refrigerados, si es que no se está en la playa y piscina. Y en estos casos, extremar la protección solar.
Por cierto, no solo vamos a tener un calor asfixiante. Tampoco correrá aire, a partir del mediodía: los vientos soplarán desde levante, con cinco kilómetros por hora de velocidad máxima.
