La polémica de las pasadas semanas sobre los Planes de Empleo, corresponde a juicio de la delegada del Gobierno a un ataque desde algunos sectores sobre su persona, a propósito de las elecciones generales y sindicales, cuando realmente las alegaciones permanecen dentro de los márgenes normales de otros años.
Los planes de empleo cumplen con el objetivo de no ser un mero apoyo social sino de convertirse en un herramienta que mejore la empleabilidad y la inserción laboral, en sectores que van desde los titulados universitarios, a los de formación más básica, y que además contribuya a la formación y la conciliación de la vida laboral con planes de aulas abiertas para también ofrecer a los niños con menos recursos, actividades complementarias que mejoren su educación.
Además han querido desmentir algunas noticias falsas que corren sobre los Planes, como que los extranjeros son quienes están copando gran parte de las plazas ofertadas, o que solo se ha contratado a licenciados, ya que el 62% de las personas que solo cumplen los requisitos mínimos de formación están incluidas.
Finalmente Salvadora Mateos ha manifestado su compromiso con las personas excluidas señalando que hay opciones más allá de los Planes de Empleo, y que se está reclamando al ministerio de Trabajo otras medidas para no dejar abandonadas a las personas que necesitan trabajar.
La previsión del SEPE es que los primeros contratados comiencen a trabajar durante la primera quincena de diciembre, una vez finalice la revisión de todas y cada una de las alegaciones presentadas, cuyo plazo concluye el viernes. Se estima que podrían alcanzar alrrededor de las 1.200. El retraso en el comienzo debido a esta revisiones tendrá incidencia también en la finalización que se estima que sea en el mes de julio, ofreciendo a los padres la posibiildad de que sus hijos partcipen en las actividades de aulas abiertas dentro los clubs de los centros escolares en esos meses estivales, si así lo deciden.
